NBA: General Manager de los Clippers es despedido

11.03.2010 11:49

Por Demian Belmonte

 

 

Ha sido un adiós prolongado en el tiempo pero, finalmente, Mike Dunleavy ya no formará parte de Los Angeles Clippers con ningún cargo.

Comenzó el año ostentando simultáneamente los cargos de entrenador y GM. En febrero dejó su puesto de entrenador para centrarse en las labores de planificación del año que viene y apenas un mes después, las diferencias de punto de vista le han costado el puesto.

Los Clippers quieren ganar ahora (por el año que viene). Consideran que tienen plantilla y medios para aspirar a más y no parece que Dunleavy esté por la labor de tirar hacia esa dirección, ya que parece seguir queriendo construir poco a poco.

Lo curioso es que, para el año que viene, sólo disponen de 5 jugadores con contrato en vigor:
Baron Davis, Eric Gordon, DeAndre Jordan, Blake Griffin y Chris Kaman. Pueden tender la qualifying offer a Mardy Collins, un jugador muy poco utilizado este año, para que sea agente libre restringido y así mantener los derechos sobre el jugador. Con respecto a Jordan, tiene un salario no garantizado y puede ser cortado antes del 1 de agosto para liberar sus 875 mil dólares de contrato en caso necesario. En principio, y con un salario tan bajo, continuará.

A nivel de presupuesto, es uno de los equipos con más margen salarial de cara al verano, aunque la planificación final se sabrá cuando se conozcan los límites salariales exactos a principios del mes de Julio. Con casi 30 millones comprometidos para el año que viene, mínimo dispondrán de 22-23 millones para fichajes y/o renovaciones.
Drew Gooden, Rasual Butler, Steve Blake, Travis Outlaw y Craig Smith son jugadores a considerar para ser renovados, siempre que el sueldo no impida intentar fichar a un par de buenos agentes libres. Al menos 3 de estos jugadores tienen bastantes posibilidades de seguir, sobre todo los aleros Butler y Outlaw, ya que los Clippers no tienen ningún alero asegurado para el año que viene.

Estas renovaciones deberán ser las primeras tareas a efectuar, o renunciar a los derechos sobre los jugadores que no quieran renovar cuanto antes porque los Cap Holds (carga salarial ficticia que dificulta que las franquicias fichen primero y renueven después) ascienden a 45 millones, lo que evitaría cualquier fichaje de un agente libre de nivel mientras todos los jugadores que acaban contrato no consigan uno nuevo, sea mediante renovación o sea porque fichen por otro equipo. Lo sencillo y rápido es renunciar a sus derechos Bird (que supone que las franquicias puedan renovar sin pensar en los límites salariales a jugadores que vienen de un contrato de 3 años o más) para así liberar los Cap Holds y disponer del espacio salarial real para pensar en los fichajes de agentes libres. La competitividad del mercado por conseguir a los grandes agentes libres que se espera habrá determinará la velocidad con la que se renueve a jugadores o se ejecuten estas renuncias de derechos.

El mayor problema está en la situación de
Blake Griffin, deseado y esperado futuro de la franquicia que, a pesar de ser nº 1 del draft, todavía no ha debutado ni lo hará hasta el año que viene.

Esta situación suscita varias preguntas:

¿Qué se puede esperar de una franquicia que depende de un jugador que aún no ha debutado para ser ganadora?
¿Qué se puede esperar de una franquicia que depende de fiche un agente libre de 1º nivel (alero, para ser más exactos) para aumentar el rendimiento?
¿Realmente está la franquicia para ser considerada como un proyecto para intentar ganar ya?

Parece que no. No obstante, el sucesor de Dunleavy, Neil Olshey, hasta ahora asistente del GM, será el encargado de intentar conseguir las piezas necesarias este verano para convertir a la franquicia en ganadora. Olshey ha tomado parte importante en los traspasos, elecciones de draft o fichajes la mayoría de los jugadores de la actual plantilla o de pasado reciente.

 

 

 

Fuente:  www.ultimatenba.com