MARTINEZ NO LOGRA GANAR EN EL YANKEES STADIUM

30.10.2009 12:57


El abridor de los Filis de Filadelfia, el dominica
Pedro Martinez siempre agradece a DIOS

NUEVA YORK (AP) - Pedro Martínez caminó lentamente al bajar de la lomita, escuchaba los gritos y burlas del público en el Bronx. Miró hacia el cielo y lo señaló como una señal en recuerdo de su difunto padre y después les sonrió a los aficionados.

Al estar en busca de otra gran victoria en su espectacular carrera, Martínez no pudo enviar a los Filis de Filadelfia de vuelta a su estadio del Citizens Bank Park con una ventaja de 2-0 en la Serie Mundial sobre los Yanquis de Nueva York. La serie quedó empatada a una victoria por bando.

Durante cinco entradas y dos tercios, la mejor versión de Pedro Martínez estuvo trabajando en la lomita, salvo por la ausencia de su imponente recta, que tuvo en su juventud.

Pero el dominicano mantuvo a los bateadores de los Yanquis totalmente engañados con cambios de velocidad y rectas inesperadas.

Como pitcher de Boston durante siete temporadas hasta 2004, Martínez libró un sinfín de memorables duelos contra Nueva York, todos cargados con el aditivo de convertirse en el blanco predilecto de insultos y burlas por parte de la afición de los Yanquis.

Y así fue el jueves en el Yankee Stadium, aunque sostuvo que no se inmutó para nada por ser otra vez el villano en la Gran Manzana.

"Era lo que se esperaba, es mi cara contra los Yanquis", declaró Martínez. "Los fanáticos de los Yanquis son los mismos de siempre. No han cambiado. Si tiras bien, eres malo. Si lo haces mal, pues peor. Como quieras eres malo.

Lo único que no le gustó, según contó, fue un momento en el que encaró a un aficionado, que cargaba a un niña en un brazo, le insultó "con toda clase de palabrotas".

"Le dije, ¿tu hija está a tu lado, es una chiquita. Da verguenza que diga ese tipo de cosas", señaló.

Martínez arrancó en ventaja 1-0, pero el partido se le escapó por culpa de jonrones solitarios de Mark Teixeira e Hideki Matsui en el cuarto y sexto episodios.

El que más daño hizo fue el del japonés Matsui, con dos outs y en cuenta de 1-2. Martínez lanzó una curva lenta fuera de la zona de strike que Matsui alcanzó y la colocó por encima de la cerca del jardín derecho para darle a los Yanquis ventaja de 2-1. El cuadrangular, que habría abandonado cualquier otro estadio, fue un duro golpe para el dominicano.

"La curva de Matsui la quería afuera, pero rompió más de lo que esperaba", relató Martínez. "Ahí donde la tiré, ahí fue donde me bateó".

El tres veces ganador del trofeo Cy Young salió en la séptima entrada después de convencer al piloto de los Filis Charlie Manuel que se sentía bien, a pesar que casi llegaba a los 100 lanzamientos.

Martínez concedió un par de sencillos consecutivos a Jerry Hairston Jr. y a Melky Cabrera antes de ser sacado del partido.

"Yo estoy súper orgulloso de la forma cómo el juego se desarrolló, no estoy desilusionado", sostuvo.

Su actuación recibió frases de admiración de sus rivales.

"Por más que ya no tenga la misma velocidad, Pedro es un pitcher que ha demostrado que sabe lanzar. Pedro tiene un corazón de león", indicó Mariano Rivera, el cerrador panameño de los Yanquis.

La decisión de Manuel de enviar a la lomita a Martínez sobre Cole Hamels, el más valioso de la Serie Mundial del año pasado para el segundo partido provocó cuestionamientos.

Sin embargo, Hamels no ha lucido del todo eficaz en la postemporada del presente año y Martínez lanzó siete entradas sin anotaciones en su partido ante Los Angeles en la serie de campeonato de la Liga Nacional.

En ese partido se enfrascó en un duelo de pitcheo contra el nicaragüense Vicente Padilla y se fue sin decisión. El jueves le tocó perder ante A.J. Burnett, pero no se quejó de la falta de bateo de los Filis en ambas aperturas.

"No es que no he tenido el apoyo, sino que me he encontrado con lanzadores que han lanzado extremadamente bien", afirmó."Más que decir que no me han dado el apoyo, sino es que no han podido",